¿Sabes como las montañas rusas mas increíbles duran tan solo un segundo?

Bueno, así fue contigo. Justo cuando yo iba a montarme, apareciste tu y sin preguntar, tomaste el asiento de alado. Y ahí comenzó todo, sin mi autorización, sin esperar nada, simplemente apareciste tu y tomaste tu lugar. Fue un corto pero sin embargo largo viaje juntos, y el mas preciado hasta ahora. Y ya sabes esa sensación que se tiene cuando comienza el juego de no querer bajar nunca, de querer que sea eterno, y conforme mas avanzas, el deseo de que no acabe nunca se vuelve mas fuerte.
Cuando se siente esa adrenalina es increíble como tantas ideas vienen a tu cabeza y cuantas cosas imaginas, por supuesto imaginas desde que te vuelves estrella de rockstar hasta que lo peor podría pasar, como morir en esa montaña rusa. Pero por los últimos instantes simplemente dejas de sentirte feliz, la ultima etapa de un juego tan enérgico, cuando ya no aguantas tanta adrenalina, cuando sujetarte del barandal ya duele, y admitirlo duele incluso mas, y por eso mantienes la sonrisa y gritas, pero ¿son en realidad gritos de felicidad aun? Me encantaría decir que si, que hasta el momento en que me baje fui la persona mas feliz del mundo.
Pero no fue de ese modo y a ti no te puedo mentir, y no puedo hacerlo porque tu te sentiste igual. Pensé en rendirme mil veces, pero tu no me lo permitiste y me sostuviste fuertemente hasta que me convencí de querer seguir con los ojos abiertos, viviendo la aventura. Y después tu quisiste dejar el juego también, y entonces yo te hice ver la maravillosa vista que teníamos.
Pero al final, hemos decido bajar juntos, y ¿sabes? esto es lo mejor de todo, lo decidimos juntos. Al mismo tiempo los dos nos hemos cansado de sostener el barandal con tanta fuerza. Y no hay nada mas que decir, todo lo que te di, es para ti, no me arrepiento de nada y sé que tu tampoco. Hemos decidido dejarlo antes de que nos pueda dejar mareados para siempre. Ha sido un segundo inolvidable y te lo agradezco con todo el amor que siempre fue para ti.

 Y no olvides que siempre podremos volver al lugar donde todo empezó, no estaré esperando pero quizás volvamos a coincidir. Buen viaje mi amor, fue un placer. Ha sido el final feliz que ambos soñamos y merecíamos, aunque no juntos, pero en paz.

-TU niña de la llave azul.